Bego Hernández

Me llamo Begoña, Bego para mis amigos, y nací hace casi treinta y siete primaveras en Alicante.

Supongo que no soy una escritora convencional, dado que mis estudios no han ido encaminados a tal fin. De hecho, estudié Ingeniería Química e imparto clases de Matemáticas. Pero lo cierto es que ya desde pequeña sentía fascinación por las letras. En el cole mis profesores decían que no era capaz de hacer una redacción sin llenarla de fantasía. Al comienzo de mi adolescencia escribía cartas de amor, como las que mi amigo Raúl me enseñó hace poco (Gracias por haberlas conservado a lo largo de los años), o aquellas con las que gané dos años seguidos el concurso de Cartas de Amor del instituto. A los catorce años me ofrecí como coordinadora voluntaria del periódico del Instituto, y a los dieciséis creé, junto con unos cuantos amigos, un grupo literario en el que compartíamos poemas, cartas, impresiones y sobre todo, una gran pasión por la escritura. A los dieciocho gané el Concurso de Novela en valenciano que organizaba nuestra profesora de COU.

Durante mi etapa universitaria seguí escribiendo todo aquello que me pasaba por la cabeza. Presenté numerosos relatos a concursos, con más o menos fortuna. En alguna ocasión incluso publicaron algunos de mis escritos en periódicos o revistas populares en el ámbito universitario.

Después la vida me trajo un marido y dos hijas maravillosos, pero también una sequía escritora. Atrás quedaron mis letras, plasmadas en un blog abandonado. Hasta que hace algo más de dos años, animada por una amiga para presentar un relato a concurso, retomé mi pasión. Un primer y un segundo premio en dos certámenes de Relato Erótico, mi marido, con su inestimable apoyo, y un buen amigo, que me dio el empujón final, han sido los alicientes para lanzarme a lo que espero que sea sólo el comienzo de esta aventura.

BEGO HERNANDEZ

Me llamo Begoña, Bego para mis amigos, y nací hace casi treinta y siete primaveras en Alicante.

Supongo que no soy una escritora convencional. Lo cierto es que ya desde pequeña sentía fascinación por las letras. En el cole mis profesores decían que no era capaz de hacer una redacción sin llenarla de fantasía.  A los catorce años me ofrecí como coordinadora voluntaria del periódico del Instituto, y a los dieciséis creé, junto con unos cuantos amigos, un grupo literario en el que compartíamos poemas, cartas, impresiones y sobre todo, una gran pasión por la escritura. A los dieciocho gané el Concurso de Novela en valenciano que organizaba nuestra profesora de COU.

Durante mi etapa universitaria seguí escribiendo todo aquello que me pasaba por la cabeza. Presenté numerosos relatos a concursos, con más o menos fortuna. En alguna ocasión incluso publicaron algunos de mis escritos en periódicos o revistas populares en el ámbito universitario.

Después la vida me trajo un marido y dos hijas maravillosos, pero también una sequía escritora. Atrás quedaron mis letras, plasmadas en un blog abandonado. Hasta que hace algo más de dos años, animada por una amiga para presentar un relato a concurso, retomé mi pasión. Un primer y un segundo premio en dos certámenes de Relato Erótico, mi marido, con su inestimable apoyo, y un buen amigo, que me dio el empujón final, han sido los alicientes para lanzarme a lo que espero que sea sólo el comienzo de esta aventura.

Me llamo Begoña, Bego para mis amigos, y nací hace casi treinta y siete primaveras en Alicante.

Supongo que no soy una escritora convencional. Lo cierto es que ya desde pequeña sentía fascinación por las letras. En el cole mis profesores decían que no era capaz de hacer una redacción sin llenarla de fantasía.  A los catorce años me ofrecí como coordinadora voluntaria del periódico del Instituto, y a los dieciséis creé, junto con unos cuantos amigos, un grupo literario en el que compartíamos poemas, cartas, impresiones y sobre todo, una gran pasión por la escritura. A los dieciocho gané el Concurso de Novela en valenciano que organizaba nuestra profesora de COU.

Durante mi etapa universitaria seguí escribiendo todo aquello que me pasaba por la cabeza. Presenté numerosos relatos a concursos, con más o menos fortuna. En alguna ocasión incluso publicaron algunos de mis escritos en periódicos o revistas populares en el ámbito universitario.

Después la vida me trajo un marido y dos hijas maravillosos, pero también una sequía escritora. Atrás quedaron mis letras, plasmadas en un blog abandonado. Hasta que hace algo más de dos años, animada por una amiga para presentar un relato a concurso, retomé mi pasión. Un primer y un segundo premio en dos certámenes de Relato Erótico, mi marido, con su inestimable apoyo, y un buen amigo, que me dio el empujón final, han sido los alicientes para lanzarme a lo que espero que sea sólo el comienzo de esta aventura.

BEGO HERNANDEZ

Me llamo Begoña, Bego para mis amigos, y nací hace casi treinta y siete primaveras en Alicante.

Supongo que no soy una escritora convencional. Lo cierto es que ya desde pequeña sentía fascinación por las letras. En el cole mis profesores decían que no era capaz de hacer una redacción sin llenarla de fantasía.  A los catorce años me ofrecí como coordinadora voluntaria del periódico del Instituto, y a los dieciséis creé, junto con unos cuantos amigos, un grupo literario en el que compartíamos poemas, cartas, impresiones y sobre todo, una gran pasión por la escritura. A los dieciocho gané el Concurso de Novela en valenciano que organizaba nuestra profesora de COU.

Durante mi etapa universitaria seguí escribiendo todo aquello que me pasaba por la cabeza. Presenté numerosos relatos a concursos, con más o menos fortuna. En alguna ocasión incluso publicaron algunos de mis escritos en periódicos o revistas populares en el ámbito universitario.

Después la vida me trajo un marido y dos hijas maravillosos, pero también una sequía escritora. Atrás quedaron mis letras, plasmadas en un blog abandonado. Hasta que hace algo más de dos años, animada por una amiga para presentar un relato a concurso, retomé mi pasión. Un primer y un segundo premio en dos certámenes de Relato Erótico, mi marido, con su inestimable apoyo, y un buen amigo, que me dio el empujón final, han sido los alicientes para lanzarme a lo que espero que sea sólo el comienzo de esta aventura.

BEGO HERNANDEZ

Me llamo Begoña, Bego para mis amigos, y nací hace casi treinta y siete primaveras en Alicante.

Supongo que no soy una escritora convencional. Lo cierto es que ya desde pequeña sentía fascinación por las letras. En el cole mis profesores decían que no era capaz de hacer una redacción sin llenarla de fantasía.  A los catorce años me ofrecí como coordinadora voluntaria del periódico del Instituto, y a los dieciséis creé, junto con unos cuantos amigos, un grupo literario en el que compartíamos poemas, cartas, impresiones y sobre todo, una gran pasión por la escritura. A los dieciocho gané el Concurso de Novela en valenciano que organizaba nuestra profesora de COU.

Durante mi etapa universitaria seguí escribiendo todo aquello que me pasaba por la cabeza. Presenté numerosos relatos a concursos, con más o menos fortuna. En alguna ocasión incluso publicaron algunos de mis escritos en periódicos o revistas populares en el ámbito universitario.

Después la vida me trajo un marido y dos hijas maravillosos, pero también una sequía escritora. Atrás quedaron mis letras, plasmadas en un blog abandonado. Hasta que hace algo más de dos años, animada por una amiga para presentar un relato a concurso, retomé mi pasión. Un primer y un segundo premio en dos certámenes de Relato Erótico, mi marido, con su inestimable apoyo, y un buen amigo, que me dio el empujón final, han sido los alicientes para lanzarme a lo que espero que sea sólo el comienzo de esta aventura.